
Los últimos tres intentos por parte de Hollywood en adaptar un musical de Broadway se han convertido en fracasos. A finales del 2004 se estrenó El Fantasma de la opera (The Phantom of the Opera), y a pesar de que sigue siendo una de los musicales más populares, recaudó una cantidad muy pobre en la taquilla estadounidense ($51 millones de dólares) y recibió malas criticas en su mayoría. En el 2005 se estrenaron por partida doble los musicales Rent y Los productores (The Producers). La situación no cambio en lo absoluto. Las dos fueron vapuleadas por la critica y sus ingresos en la taquilla americana fueron de nuevo bajísimos ($30 millones para la primera y $19 millones para la segunda).
Así es que bajo este panorama llega a la pantalla grande el musical Soñadoras (Dreamgirls). Adaptada de una obra de Broadway de los años 80, esta cinta es dirigida por Bill Condon, quien hace unos años escribio el guión de Chicago. El filme narra la historia de tres mujeres (Deena Jones, Effie White, y Lorrell Robinson) que desean convertirse en cantantes de pop. Su gran oportunidad les llega cuando son elegidas como coristas del famoso cantante de soul James "Thunder" Early. Es a partir de ahí que estas tres mujeres empiezan a vivir en carne propia lo que es ser cantante en el difícil mundo de la música, donde los celos, las envidias, las rivalidades, y los romances están a las ordenes del día.
El elenco de la película esta compuesto mayoritariamente por actores afroamericanos. La famosa cantante Beyoncé Knowles tiene a su cargo el papel de Deena, la líder del grupo, Eddie Murphy interpreta al músico James "Thunder" Early, el actor y cantante Jaime Foxx interpreta a Curtis Taylor, Jr. y la debutante Jennifer Hudson, quien se roba la película con su interpretación de Effie White. La cinta retrata la época de la música Motown, en la cual empezaron a aparecer varios artistas afroamericanos de pop, tal como el grupo The Supremes y el músico de soul James Brown. De hecho se dice que el trío de cantantes de la cinta, The Dreamettes, está inspirado en el grupo de Diana Ross.
Esta es una cinta que brilla más por los números musicales, el diseño de producción, el vestuario y la música que por las actuaciones o la historia en sí.
Todos los actores interpretan de maravilla sus canciones, realmente les ves la emoción en las caras de que están sintiendo todo lo que están cantando. En este sentido Jennifer Hudson es toda una revelación. Tiene una voz maravillosa y una presencia escénica impactante. Ella se roba la película y lo más seguro es que gane el Oscar a la Mejor Actriz Secundaria a finales de febrero.
Uno de los puntos negativos de la película es que el director llega a abusar un poco de los números musicales hasta el punto en el que parece que estamos viendo un video-clip de dos horas. Es por eso que casi no hay diálogos hablados y cuando los hay la película baja de ritmo y los personajes se vuelven menos interesantes. En sí nunca llegamos a conocer muy bien quienes son ya que el director esta más interesado en ponerlos a cantar en un escenario que en contarnos un poco más acerca de ellos. La historia también abandona a varios de los personajes: en un momento de la cinta Effie White sale de la historia y vuelve a entrar unos 30 minutos después! En resumidas cuentas, me hubiera gustado ver un poco menos de números musicales y un poco más de complejidad y desarrollo en los personajes.
Pero a pesar de todo esto, la película es un agasajo visual, es muy entretenida y la música es de verdad excelente.
Soñadoras cuenta con ocho nominaciones a los Oscares y es sumamente recomendable para todos aquellos que les gusten los musicales y que quieran pasar un buen rato en el cine.
Calificación: 8/10